Algunas firmas empiezan a incorporar lugares con cómodos sillones, luces tenues y música relajante para dormir en pleno horario de trabajo. Estudios científicos aseguran que una breve siesta sirve para despejarse y ser más productivo
Por XIMENA CASAS
Si bien es incipiente, ya marca una tendencia: Algunas empresas locales ya están comenzando a acondicionar espacios especiales de descanso para sus empleados en sus propias oficinas. Se los conoce como siestarios y su objetivo es que los miembros de la organización tengan un lugar donde puedan relajarse e incluso realizar una pequeña siesta.
Así, se puede disfrutar de cómodos sillones, luces tenues y música relajante en pleno horario de trabajo. Acondicionamos espacios especialmente. Diseñamos sillones de siesta, para mejorar la relajación muscular, e incorporamos estímulos para los cinco sentidos, como luces, aromas y texturas. También sonidos preparados para inducir al sueño y acompañar el descanso con auriculares para cancelar el sonido externo, una almohadilla ocular con semillas de lino y lavanda que evitan el contacto con la luz, aromas equilibrantes y una iluminación selectiva en azul y verde, detalló Daniel Leynaud, creador de la empresa Drom-Cronobiología.
Leynaud inauguró hace tres años el primer siestario de la Argentina, ubicado en el microcentro porteño (Córdoba y Florida), pero ahora está llevando su negocio directamente a la sede de las compañías. Muchos ejecutivos no tenían tiempo de acercarse hasta el siestario y nos pedían llevarlo a las empresas, señaló el emprendedor. Así, ya instalaron espacios de siesta con dos sillones en el edificio de las radios Metro y Rock and Pop, que se ampliarán en breve. Otra compañía que apuesta al descanso como una buena medida para mejorar la salud de sus empleados y el clima laboral es la sede local de Google, en Puerto Madero. La empresa ya está preparando su propio siestario. Como parte de una ampliación de la oficina, que queremos inaugurar antes de fin de año y cuyo eje temático es el bienestar, se va a incluir un nuevo espacio para masajes, un rincón de gimnasia y un siestario con una chaise-longue ergonómica, dimerización en la iluminación y música de relajación, explicó Priscila Bertiz Lanzillotti, gerente de Operaciones de Google Hispanoamérica. En Google hacemos mucho foco en el bienestar de las personas y, por supuesto, en el de nuestros empleados. El buen uso y la optimización de la energía de cada uno de quienes trabajamos acá es algo que buscamos promover desde el espacio de trabajo. Hay estudios científicos que demuestran que recargar la energía con una pausa en la jornada te despeja la mente y te hace ser más productivo inmediatamente después de ese corte. Somos una integralidad cuerpo-mente y eso funciona bien cuando ambas partes están en orden. Hoy contamos con un relax room para lectura silenciosa, dos sillones masajeadores y clases de yoga dos veces por semana, agregó la ejecutiva.
Según los datos de la empresa Drom-Cronobiología que cuenta con asesoramiento médico y científico de profesionales de la Universidad Católica Argentina y el Conicet, el 25% de los argentinos padece de problemas severos de sueño y el 50% tiene algún inconveniente para dormir. Esto afecta la calidad de vida de las personas y, como consecuencia, disminuye el nivel de desempeño profesional y social.
Las alteraciones prolongadas en la cantidad y calidad de sueño se asocian además a la aparición de distintas enfermedades como obesidad, diabetes e hipertensión e incrementa nuestras probabilidades de cometer errores o sufrir accidentes, explicó Daniel Vigo, investigador del Conicet en el Laboratorio de Neurociencias e integrante de Drom-Cronobiología.
Según los especialistas, una siesta controlada, de no más de 20 o 30 minutos, denominada power nap permite reiniciar el día, cuando el cerebro se bloquea frente a las exigencias y la cantidad de información que debemos manejar y compensa en parte la deuda de sueño.
SITIO WEB
Cronista, [Web en línea] http://www.cronista.com/negocios/Descansar-en-la-oficina-las-empresas-suman-espacios-para-dormir-la-siesta-20130729-0008.html [Consulta: 02-8-2013]